El trabajo en el taller apunta a que el concurrente logre tomar conciencia de su funcionamiento afectivo, de su conducta, modos de reaccionar, ante determinadas situaciones con las que se enfrenta en la vida cotidiana y le generan conflicto para que logre transitar estas situaciones desde un lugar diferente y a la vez le permitan cambiar su posicionamiento ante las mismas.
Se apunta a que el concurrente sea un sujeto protagonista, con pensamiento crítico y capaz de problematizar, de acuerdo a las capacidades de cada uno.